Me cago en la leche!

Querida pasión: dónde te habré perdido? Será en mis años locos, o en la cancha de Racing? Es posible que ya no te encuentre? Acaso hay viejos apasionados? Bueno, yo no puedo decir que soy viejo a esta altura de mi vida, tan solo hay cosas viejas, pero no las descarto. Y si te quedaste en una hermosa concha que regresó al fondo del mar? Cómo haré para encontrarte? Si, ya se que los Beatles primero y tanta música y mi guitarra sucia y desprolija son cosas apasionantes pero vos sabés a qué me refiero, no te hagas la boluda. Decís que estás en las pequeñas cosas? Puede ser. También sabes que me gustan las grandotas, los extremos, llegar a cierto límite. Ese regalito extra que se llama adrenalina. Yo no creo en la pasión quietecita, eso es paja mental y de pajas suficiente como para un master. Se que tenés buena cintura para esquivar(me). Ahora sos vos la que no me elije? Qué tal si salimos de paseo? Yo te tomo de la mano, en silencio, vamos hasta el aeropuerto...mierda ya ni aviones hay. Te das cuenta! Al final con vos no se puede ir a ningún lado che, si no es esto es aquello, parece que me tomás el pelo. Más bien podrías acariciar mi pelo hasta que me duerma como un gato sobre tu falda y nos daríamos calor mutuo, ya no temo quemarme ni llorar por ver la vaca.