jueves, 7 de julio de 2011

Nadando en la gran pecera dorada

Casi una semana desde que empezó el mes para recibir el dinero del salario y solo un par de horas para tirarlo por la ventanilla de cajeros, cajeras y carajos. No es mi dinero ni el de nadie, se va o se esfuma, se teletransporta, gira con el mundo. A dónde está todo el dinero que gane cuando trabajaba? Quién lo tiene? Ahora no gano ni un céntimo, tan solo me están… aguantando. No sé por qué ella lo hace, debe tener sus motivos que desconozco, no quiero saber! No tiene sentido. Que mujer increíble, tiene la espalda más ancha que jamás haya conocido en mi vida. Dentro alberga una de esas cajas de magos que pueden sacar mil conejos y guardar hasta un edificio entero, y ella no es maga ni bruja. Simplemente es la persona que no debería estar a mi lado, soy como un gusano de la seda que come, se reproduce y caga vestidos para novias. Si yo no gasto en nada, limpio el baño sin asco y cocino guisos de abuela, planté los árboles del jardín y la ceniza los tapó, levante una puta pared que casi se viene abajo. Nunca será suficiente para llenar la caja mágica, es el mundo entero que no alcanza, como el salario. A nadie le alcanza gane lo que gane. Boletas, cosas, cositas, comida enlatada, abrigo, botas, cremas, cepillos de dientes y pañales para perros. La factura del agua nos invita a cuidar ese bien de la humanidad que a cada minuto le aportamos todo lo que nuestro cuerpo ya no necesita. Voy como un buen ciudadano a pagar por el agua que sale de las canillas y en la calle encuentro un manantial corriendo por cada cordón cuneta, grietas en el pavimento escupen agua como volcanes, hay agua por todos lados! Menos en el cielo, claro. Cuanto hace que no llueve por aquí? Ya ni recuerdo la última vez. Que significan esos dobles mensajes? Cuidemos el agua así podemos disfrutar de como se congela en cada esquina cuando salimos a la mañana y si tenemos suerte podemos ver a una vieja resbalar y romperse el culo en la calle, en la cola del hospital y en la caja de pagos. El medio ambiente preciado. Nada de bolsas de supermercados. Y el paquete de salchichas de que mierda está hecho? Amado planeta: te prometo que mañana seguiré comprando y consumiendo todo lo que me dice mi dios, cargaré con la culpa de haber nacido, soy el mal en la tierra pero no me permites suicidarme. Seguiré subiendo la piedra por la montaña y tendré el tiempo suficiente para pensar que todo es un gran sueño a pesar del olor de mis sobacos. 

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